Los valores de Cáritas diocesana son los evangélicos, y de manera especial:
La caridad, que funda la identidad de la institución y se dirige de manera preferencial a los pobres y marginados, por quienes se opta en nombre de la fe cristiana.
La persona, con su dignidad sagrada y su centralidad en toda intervención o actuación social de cualquier género.
La justicia, por la que se intenta la superación del reparto inequitativo de la riqueza y de la marginación a la que se somete a los menos favorecidos.
La fraternidad, en cumplimiento del mandato del Señor: “Amaos unos a otros como yo os he amado”.
La participación, porque la acción de la entidad quiere ser el resultado de la colaboración de todos los que la componen, aplicando el principio de subsidiariedad mantenido por la doctrina social de la Iglesia.